El pasado sábado 13 de enero hicimos el primer encuentro del Grupo Asesor de la investigación «Safespaces: Mentoría, Bienestar emocional y Salud mental con personas migrantes y refugiadas» en el que participaron personas ex-mentoradas de Punt de Referència, QuilometreZero, NousCims, UdG, Resilis y el Programa de Mentoría de la Dirección General de Migraciones, Refugio y Antirracismo de la Generalitat de Catalunya.

«Safespaces» es un proyecto de evaluación de impacto financiado por la convocatoria Conecta del Observatorio de Fundación La Caixa coordinado juntamente con la Universitat de Girona y con el apoyo de la Dirección General de Migraciones, Refugio y Antirracismo de la Generalitat de Catalunya.

En un contexto en el que la envergadura de los procesos migratorios es creciente y con un sistema de acogida saturado e infradotado, la mentoría social se posiciona como una herramienta socialmente relevante para la inclusión de personas migrantes además de generar relaciones interculturales que perduran en el tiempo. Relaciones que son potenciadoras de un sentimiento de pertenencia que a su vez facilita el acceso a nueves espacios comunitarios, generando bienestar emocional.

Durante la mañana del sábado, intercambiamos experiencias y puntos de vista que nos ayudarán a desarrollar la investigación y a abordar la perspectiva antirracista en los programas de mentoría social. Aunque como sociedad todavía tenemos trayecto por recorrer, se evidenció que la mentoría permite crear vínculos horizontales que a su vez transforman nuestra realidad y contexto.

Os iremos contando.

Un co-proyecto con Universitat de Girona

Con la colaboración de:

Este miércoles 17 de enero hemos celebrado el Día Internacional de la Mentoría Social con la Jornada La mentoría social: una herramienta esencial para la transformación social en España en el CaixaForum Madrid y con la colaboración de Fundació La Caixa. 🎊🎊🎊🎊

Más de 100 personas de la comunidad estatal de mentoría social han asistido a la Jornada: 14 testimonios de personas mentoras y mentoradas, entidades sociales, académicos y representantes de administraciones públicas. Como Patricia Bezunartea, Directora General de Diversidad Familiar y Servicios Sociales del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 de España; María Soledad Nava, Directora General de Políticas Migratorias del Gobierno de Navarra; Marlen Niubó, responsable de Implementación de Políticas de Migraciones, Refugio y Antirracismo de la Generalitat de Catalunya; Òscar Prieto-Flores, Profesor en la Universitat de Girona y director de la investigación Applying Mentoring; Karlos Ordoñez, Presidente de la Coordinadora de Mentoría Social y director de SOS Racismo Guipúzcoa; Marc Viñas, Subdirector general de Cooperación Social y Voluntariado, Generalitat de Catalunya. Además contamos con representantes de entidades sociales que presentaron testimonios y proyectos relevantes (como Fundación Ayo, Fekoor, Faciam o Eufonía Diversity) y los testimonios emotivos de personas mentoras y mentoradas de algunas entidades de la Coordinadora de Mentoría Social (Fundación Baketik, Associació Quilòmetre Zero, Dones Mentores, Fundació Nous Cims, Punt de Referència, Universidad Pública de Navarra).

Entre todas, hemos puesto en valor la mentoría social como herramienta clave para acceder a los derechos sociales y la igualdad de oportunidades en el marco de la transformación del modelo de atención social centrada en la persona.

Puedes recuperar la Jornada en nuestro canal de youtube. 👉🏽👉🏽👉🏽 Os dejamos el enlace aquí.

Si te interesa difundir la Jornada, a continuación encuentras la nota de prensa y material fotográfico.

#MentoringMonth#JornadaMentoria#MentoriaSocial
#DerechosSociales#TransformarRealidades
#TransformarRealitats#Errealitateakeraldatzen

Con el apoyo de:

El pasado 28 de mayo celebramos la 6ª Asamblea anual de Entidades de la Coordinadora de Mentoría Social. Cada año, las entidades que conformamos esta red nos reunimos para evaluar la memoria y las cuentas del ejercicio anterior y proyectar hacia dónde queremos dirigirnos en el futuro.

Esta vez, siguendo con la dinámica del último año, nos reunimos virtualmente y dedicamos un primer espacio a la lectura y aprovación de documentos y una segunda parte al debate sobre el potencial de crecimiento e incidencia de la Coordinadora a través del Tercer Sector, de las universidades y de las instituciones públicas.

Sin embargo, el momento de mayor emoción fue, sin duda, el de la aprovación de la entrada de las cinco nuevas entidades que hoy ya forman parte de la Coordinadora de Mentoría Social.

Dimos la bienvenida a AEI Raval, Asociación Landalan, Dones Mentores, Fundación Baketik y Fundació Impulsa, que llevan a cabo proyectos de mentoría en distintos ámbitos y a las que os iremos presentando poco a poco las próximas semanas. Todas ellas ya han iniciado, además, su proceso de obtención del Sello MC.

Seguir creciendo, ser más y mejores, forma parte de nuestro Proyecto Estratégico 2021-22, en el que también destacamos trabajar por el reconocimiento e incidencia pública y seguir dando apoyo a los proyectos de mentoría social alrededor del país con herramientas como el Sello MC. Durante las próximas semanas anunciaremos más novedades que nos hacen mucha ilusión. Por el momento, damos la bienvenida a las nuevas entidades de la Coordinadora de Mentoría Social, que se unen al camino del reconocimiento de la mentoría social de calidad y de las que seguro que podremos aprender para seguir creciendo y mejorando.

Llegamos al final de este 2020 que, sin duda, nos ha hecho cambiar la forma de percibir el mundo y nuestro entorno. Cerramos el año con el peso de meses de incertidumbre y de mucho trabajo, pero también con la certeza de haber estado presentes y de haber seguido adelante para ofrecer a nuestras entidades, a las personas voluntarias y a las mentoradas el apoyo que necesitaban.

Cerramos el año con una buena mochila de proyectos terminados y otros por empiezan; con la ilusión y la motivación para seguir siendo la principal red de entidades que trabajan con la mentoría social como herramienta para la inclusión social.

Empezamos el 2021 con el deseo de poder seguir trabajando para la inclusión social, poder seguir creciendo como red de entidades y poder seguir promoviendo la mentoría de calidad al lado de las organizaciones y profesionales que hacen posible esta Coordinadora de Mentoria Social.

Gracias a todas las personas que apoyáis esta herramienta tan importante que es la mentoría, desde las instituciones y desde el voluntariado.

Llega junio y, como cada año, muchos programas de mentoría terminan su ciclo. Tenemos que llevar a cabo una revisión del curso y empezar a preparar la vuelta de septiembre. Además, este año seguimos con la necesidad añadida de analizar el contexto actual y adaptarnos. Por todo ello, presentamos el calendario de actividades del mes de junio de la Coordinadora de Mentoría Social, con actividades exclusivas para nuestras entidades socias y adheridas y la Asamblea anual de entidades. Todo ello, a través de la pantalla. #LaMentoriaNoPara

A nivel interno, el 1 de julio se celebrará un grupo de trabajo para los programas Rossinyol/Ruiseñor/Urretxindorra. Además,  se realizarán dos formaciones internas enfocadas al contexto actual, en las que hablaremos de la mentoría social en el entorno virtual a través de los aprerndizajes de los últimos meses (16/06) y sobre la construcción de los vínculos en un contexto de distanciamiento social (25/06). La Asamblea de entidades se celebrará el día 19 de junio y, para terminar, el 1 de julio realizaremos una sesión de intercambio en la que los programas de la Coordinadora de Mentoría Social pondremos en común dudas y soluciones de cara al inicio del nuevo ciclo el mes de septiembre.

Paralelamente, desde la Coordinadora seguimos organizando webinars europeos juntamente con el European Center for Evidence-Based Mentoring como co-organizadores del 2020 European Mentoring Summit. El 10/06 celebraremos una sesión enfocada a explorar las posibilidades que las herramientas e innovaciones virtuales ofrecen a los programas de mentoría. Para ello, hablaremos con Marta Riera (Fundación Exit), Tina Braun (Universität der Bundeswehr München) y con Daniel Horgan y Tracy Luca-Huger (Power of Mentoring, US y Canadá). Una vez más, la sesión #KeepMentoring es en abierto, y podéis acceder a ella a través de la web del European Mentoring Summit.

OPINIÓ | Marina Claverias (Associació Quilòmetre Zero)
Article publicat inicialment a Xarxanet (05/05/2020)

En aquest moment d’especial incertesa causada per la COVID-19, les entitats i persones que treballem en l’àmbit de la mentoria social ens plantegem com afectarà la crisi a les persones a les que acompanyem amb els nostres programes, així com a la situació de vulnerabilitat que ja patien.

Tot i la gran diversitat de persones i col·lectius als quals ens dirigim (menors, adolescents, joves o adults), totes les entitats compartim el fet de treballar en l’àmbit de les vulnerabilitats.

Actualment, la qüestió és on posem el focus quan ens plantegem a quins nous i delicats escenaris s’enfrontaran els mentorats i mentorades dels projectes que gestionem. I quantes persones més podrien beneficiar-se de la mentoria per millorar els nous escenaris de vulnerabilitat i vulneració a què hauran de fer front.

La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social a Espanya, coneguda per les seves sigles en anglès EAPN-ES, ha publicat un informe sobre les necessitats observades per les entitats socials en relació amb el coronavirus, en què 90 entitats socials d’11 comunitats autònomes exposen com creuen que la COVID-19 afectarà l’entorn de l’acció social amb persones en situació de vulnerabilitat.

Seria interessant fer un anàlisi de tots els col·lectius y persones als quals es dirigeix l’informe, però destacarem tres grans grups que tenen a veure amb persones a qui es dirigeixen majoritàriament els projectes de mentoria social a Espanya: infància en situació de pobresa o vulnerabilitat, nens/es, adolescents migrants i joventut tutelada i/o ex tutelada, així com adults migrants.

L’informe destaca que les persones professionals de les entitats interrogades creuen que la situació de la COVID-19 afectarà a les persones immigrants en un 64,4% de manera molt notable i en un 32,2% de manera notable. És a dir, que les afectarà en el 96,4%. De la mateixa manera, la infància que ja es trobava en situació de vulnerabilitat es veurà molt afectada en un 70%, i parcialment afectada en un 26,7%. És a dir, que es veurà afectada en un 96,7%. Finalment, a les persones ex tutelades, en un 46,4% molt afectades i en un 47,8%, parcialment afectades, fet que ens aporta la dada que es veuran afectades gairebé en un 94,2%. I així successivament amb persones i col·lectius que ja es trobaven en situació de risc.

Aquest informe avança una percepció més que generalitzada de les entitats del tercer sector: que en la seva totalitat, les persones a qui van dirigits els projectes de mentoria es veuran afectades per aquesta situació. És a dir, que es trobaran en situacions de major inestabilitat psicosocial i econòmica.

Els projectes de mentoria poden ser una eina per a oferir recursos de reconeixement en aquestes situacions, així com recursos de resistència i transformació per a les persones a qui van dirigits.

En aquest moment que ens ha tocat surfejar, la gran majoria d’organitzacions hem adaptat propostes i activitats i creat noves iniciatives per donar resposta a aquesta situació a través de la mentoria. Hem plantejat amb les persones mentores i mentorades la possibilitat de celebrar trobades telemàtiques i de seguir construint el vincle tot adaptant-lo a la situació de confinament.

D’aquesta situació n’estem extraient molt bones pràctiques de reconeixement, ajuda mútua, reforç emocional i acompanyament que les persones mentores estan oferint a les mentorades. Son agents de canvi en tant que acompanyen, reforcen i, en alguns casos, amb l’ajuda dels i les professionals de les entitats, detecten situacions de precarietat o vulnerabilitat.

Les professionals hem editat guies específiques per a cada programa per tal que es mantinguin els objectius previstos en les relacions de mentoria, tot acompanyant més exhaustivament les persones voluntàries i a les persones mentorades.

La majoria de programes realitza actualment un seguiment setmanal de totes les parelles de mentoria involucrades en els projectes, tot oferint acompanyament emocional i proposant activitats i ajuda efectiva al voluntariat i a infants i joves.

Les trobades entre parelles, tot i les dificultats que suposa l’accés a Internet i a dispositius mòbils per a molts d’aquests infants i joves, es realitzen pràcticament amb la mateixa assiduïtat de manera telemàtica. Ens estem coordinant amb agents implicats en la vida d’infants, adolescents i joves (escoles, centres de formació, referents socioeducatius, centres comunitaris, serveis socials, etc.) que participen en els programes amb l’objectiu que la mentoria sigui una peça més en l’engranatge de la cohesió social.

En alguns casos, hem coordinat amb escoles, instituts i referents educatius els tràmits per accedir a dispositius portàtils, mòbils o Internet per tal d’afrontar la gran bretxa digital en què es troben els i les mentorades. I, en altres casos, hem ofert directament a infants i joves accés a Internet o dispositius no només per tal de mantenir la mentoria, sinó també, i de manera prioritària, per tal que puguin continuar les formacions que realitzaven. Estem fent especial èmfasi en detectar possibles situacions de precarietat, per tal de poder-les atendre o derivar a serveis especialitzats.

Sense els i les professionals dels programes de mentoria que cuiden, atresoren recomanacions i que guien i construeixen els pilars més importants per tal que les relacions de mentoria puguin desenvolupar-se, les trobades entre les persones mentores i mentorades no podrien seguir. Ara més que mai, necessitem el reconeixement i el recolzament per part de les administracions públiques i altres institucions implicades en els nostres programes.

És per això que ens plantegem en quina mesura podrem seguir acompanyant a aquelles persones que, amb la situació actual, veuran afectades les seves vides; de manera que no és aventurat pensar que necessitaran més ajuda i de més qualitat.

Des de la coordinadora de mentoria social, treballem per la sistematització de les nostres pràctiques, l’elaboració d’un segell de qualitat en mentoria social i la coordinació i la formació continuada dins de les entitats, també per adaptar-nos a nous paradigmes com l’actual.

En moments d’especial incertesa com el que vivim, seguim sumant esforços per a fer possible que la mentoria arribi de la forma més transformadora possible a les persones a les que atenem.

Por Equipo de Mentoría de SOS Racismo Gipuzkoa

Los proyectos de mentoría social, y más específicamente los que llevamos a cabo con menores en situación de mayor riesgo, tienen una relación muy directa con los centros de enseñanza en diferentes fases del programa.

Estos centros tienen entre sus objetivos el de favorecer oportunidades equivalentes de aprendizaje y desarrollo personal y social. Cuando no es así, el espacio escolar puede reproducir y agudizar las desigualdades. Pero cuando la escuela cumple con su papel favorecedor de la inclusión de todos y todas las niñas que la conforman, entonces se convierte en un espacio que facilita ese desarrollo y que consigue paliar, en parte, las desigualdades sociales que existen. En muchas ocasiones, la escuela y las actividades extraescolares representan la principal fuente de estructura y sociabilidad de los menores; además de ser las principales proveedoras de muchos servicios esenciales, como son los comedores escolares.

El Estado de Alarma decretado el día 14 de marzo de 2020 afectó directamente no sólo a las relaciones de mentoría, sino también a las coberturas básicas que las familias de los y las mentoradas recibían (alimentación, relaciones sociales, conciliación, mayor riesgo de precariedad, etc.). Tal y como afirma la Unesco, «el cierre de las escuelas agrava las desigualdades en la educación y afecta de manera desproporcionada a los niños y jóvenes más vulnerables», entre los cuales un buen porcentaje está representado por la infancia de origen inmigrante. El papel inclusivo que puede llegar a cumplir la escuela ha sido relegado a los padres, madres y tutores que, en muchos casos, carecen de los recursos necesarios –capital social, cultural, lingüístico o recursos materiales– para generar aprendizaje y acompañar a sus hijos e hijas en el proceso formativo.

La educación online es una solución diseñada para familias con determinadas condiciones materiales, personales y familiares, tiempo y formación suficientes como para llevarla a cabo. Estos diferentes puntos de partida conllevarán claramente a diferentes consecuencias educativas y sociales.

La brecha digital se suma a esas diferentes condiciones de partida. Muchas familias carecen de ordenadores u otros dispositivos electrónicos y, en muchos casos, tampoco cuentan con una conexión internet. A esto se añade que, en familias con más de un hijo/a en edad escolar, o en familias monoparentales, la necesidad de ordenadores aumenta, aspecto que empeora en el caso en que los padres/madres lo necesitan para realizar el teletrabajo. La brecha digital se ve amplificada a veces por la falta de habilidades tecnológicas y digitales de los padres y/o madres, que encuentran dificultad a la hora de gestionar los deberes que llegan a través del correo electrónico o que los profesores cuelgan en plataformas virtuales.

El confinamiento requiere como nunca de la complicidad de las familias en el proceso de aprendizaje. Desafortunadamente, el seguimiento por parte de los padres y madres sobre las tareas escolares no siempre es posible. Muchas familias trabajan en situaciones precarias y en duras condiciones que conlleva el pasar muchas horas fuera de casa impidiendo poder realizar un seguimiento de sus hijos, no sólo en las tareas escolares, sino también en mantener una rutina diaria tan necesaria en la estructura de los y las niñas.

Por otro lado, la otra gran dificultad son las situaciones de precariedad y malestar que están sufriendo muchos hogares, no solamente por la emergencia de salud, sino también por la inestabilidad habitacional, económica y laboral. La pérdida de empleos, en muchos casos irregulares, conllevan preocupaciones y dificultades que repercuten en la posibilidad de seguimiento de los hijos/as y genera estrés y tensión en el ambiente familiar, con las consecuencias que esto conlleva para el bienestar de los y las niñas y las posibilidades de concentración e interés para los estudios. Esta concentración también se ve dificultada por las condiciones de algunas viviendas que carecen de luz natural, espacios amplios y privados, compartidos con otras personas o, en el peor de los casos, cuando la familia vive en una habitación.

La brecha educativa está causada también en parte por las dificultades lingüísticas de muchos niños y niñas de origen migrante. En Euskadi, la mayoría de las familias de origen migrante no hablan ni entienden el euskera por lo tanto les resulta imposible ayudar a sus hijo/as con las tareas escolares. A esto se añade que estos niños y niñas pierden la oportunidad de estar en contacto con este idioma tan necesario para su inserción socioeducativa y laboral.

Esta crisis sanitaria ha visibilizado la importancia de la institución escolar y de todos los servicios complementarios para fomentar una relativa igualdad de oportunidades educativas y, por lo tanto, una menor exclusión social futura. Pero, por otro lado, ha visibilizado la brecha social que respalda la brecha educativa y que demuestra el impacto del origen social, étnico y cultural en el logro y continuidad formativa.

En esta realidad, la importancia de los proyectos de mentoría con menores en edad escolar adquiere una dimensión aún mayor. En la situación descrita, la presencia de una mentora o mentor que acompaña, que escucha, asesora, comparte, socializa con el niño o la niña hemos constatado que se convierte en un servicio de mayor calado. En los dos meses en los que hemos tenido que estar aislados/as, el mantenimiento de ese hilo con “el mundo exterior” a través de esta persona de confianza ha supuesto para los niños/as, poder exteriorizar su angustia, compartir sus dudas, exorcizar los miedos.

El mantenimiento de la relación en la distancia (a través de llamadas o videos llamadas) ha supuesto una pequeña tabla de salvación y para las madres, en algunos casos, una tranquilidad en medio de tanta desazón. Una madre nos lo explicaba así:

“De hecho, le veo y están dos horas hablando, juegan. A nivel emocional para él es de gran satisfacción. Siempre me pregunta, “¿te ha llamado María?, ¿puedo hablar con ella?”. Me ha ayudado mucho; agradezco enormemente su tiempo para poder hablar con él, porque me apoya mucho, para que tenga la mente en otras cosas o hable con ella de cosas que a lo mejor a mí no me cuenta, o el simple hecho que tenga una videollamada con alguien con quien tiene una cierta amistad, con alguien de aquí. Tuvo su cumpleaños hace una semana y María le llamó y fue muy bonito para él. Su apoyo es enorme”.
(Cintia, madre de un niño mentorado de 12 años dentro del proyecto Urretxindorra)

Si bien las diferentes brechas que hemos descrito anteriormente no desaparecen con la mentoría social, el mantenimiento y apuesta por este servicio va directamente en la dirección de esos apoyos tan estratégicamente necesarios en esta situación de crisis a las personas en riesgo o en situación de precariedad. Las relaciones de mentoría son una baza estratégica que además apunta en la dirección del conocimiento social de la salud psicosocial que la crisis está dejando en nuestra sociedad. Son un apoyo en un momento en el que nos jugamos el futuro de nuestra sociedad. La mentoría social ha de considerarse como lo que es en la nueva realidad: un valor añadido en su aporte a esa red social que instituciones y entidades debemos crear para que sea cierto “que no dejamos a nadie atrás”.

El pasado 13 de mayo, junto al European Center for Evidence-Based Mentoring, como co-organizadores del European Mentoring Summit 2020, organizamos el primer webinar de la campaña #KeepMentoring, una oportunidad de aprender y compartir, aportar idear, inspirarnos las unas a las otras y buscar nuevas oportunidades.

Tras hablar con distintas entidades y profesionales de la mentoría, nos dimos cuenta de cuán importante es, ahora más que nunca, el intercambio de experiencias y conocer qué se está haciendo en otras partes del mundo. Antes que nada, queremos reconocer el trabajo que se está haciendo desde las organizaciones en toda Europa para mantener los programas de mentoría activos y seguir apoyando a las personas mentoras y mentoradas.

El buen trabajo que estáis haciendo nos ha inspiró a hacer algo para vosotras, entidades y profesionales, a aportaros herramientas, recursos e inspiración para que sigáis con el buen trabajo.

Así pues, estamos organizando estos espacios positivos donde compartir experiencias y buenas prácticas. Un buen desarrollo profesional es ahora más importante que nunca para poder seguir acompañando a las personas mentoras y mentoradas. Es por ello que nos seguiremos encontrando telemáticamente a través de los webinars para ofreceros conocimiento y recursos para el presente y el futuro.

#KeepMentoring: Road to the Summit

En la primera sesión, compartimos el escenario virtual con Julie Gehring, University of Connecticut, Laura CardúsAFEV Catalunya y Gysbert BergsmaStichting VerbindMij. Fue una experiencia muy positiva para todas las personas asistentes, pero especialmente para nuestros equipos de la organización. Confirmamos cuán necesario es seguir conectadas y compartiendo durante el confinamiento. Durante la sesión, más de 150 personas se conectaron en directo para seguir el webinar. Recibimos a personas de distintas organizaciones europeas, ¡pero también de otras partes del mundo!

Mapa de asistencia al webinar #KeepMentoring (13/05/2020)

Durante la sesión, os invitamos a participar de una creación. Os pedimos palabras positivas, que os inspiren durante estas semanas complicadas que nos ha tocado navegar.

Sin duda, fue una experiencia positiva e inspiradora, y la participación, la energía de los y las asistentes, así como las aportaciones de las ponencias, nos reafirman en la necesidad de seguir organizando más webinars.

La próxima cita es para el 10 de junio. Pronto difundiremos la convocatoria del webinar en el que hablaremos, sobre todo, de protección de datos y herramientas digitales aplicadas a la mentoría. Si quieres estar al día de las convocatorias, ¡visita la web del European Mentoring Summit y suscríbete a su newsletter!

Laura Terradas Cargol es Coordinadora de Programas de Punt de Referència, asociación que fue fundada en 1997 con el objetivo de acompañar y apoyar a la juventud vulnerable, en concreto la tutelada y extutelada, en el proceso de emancipación. Laura nos cuenta cómo están viviendo las semanas de confinamiento las personas mentoradas de este colectivo.

¿A qué colectivo va dirigido vuestro programa de mentoría?

En Punt de Referència llevamos a cabo tres proyectos de mentoría social: Referents, Atenea y GR 16-18, para acompañar a los y las jóvenes tuteladas y extuteladas en su camino hacia la emancipación. Des de 1997, trabajamos en red con las otras entidades que acompañan a los y las jóvenes para ampliar los recursos personales y oportunidades con las que cuentan para hacer frente a una emancipación temprana. Estos y estas jóvenes se emancipan entre los 18 y 21 años –mientras que la población general en Cataluña lo hace a los 29 años– y en un contexto exigente, donde el punto de partida genera desigualdades significativas para las propias trayectorias. Además, des de hace 5 años, formamos y acompañamos a otras organizaciones que quieren poner en marcha sus proyectos de mentoría social con jóvenes. Desde 2012 somos miembro fundador e impulsor de la Coordinadora de Mentoría Social.

¿Qué beneficios aporta la mentoría a estas personas?

Contar con alguien es ser importante para alguien”. Reconocimiento, escucha, afecto, apoyo, aprendizaje, diversidad de visiones y oportunidades es lo que aporta la mentoría social. Las relaciones de mentoría social son una oportunidad para construir contextos y recursos de resiliencia para la juventud tutelada y extutelada: más seguridad en una misma, más oportunidades de participación y espacio para desarrollar las habilidades para afrontar los retos de la emancipación. La mentoría social contribuye a fortalecer las capacidades de resiliencia y a abrir nuevas y más oportunidades para que la juventud tutelada y extutelada tenga más opciones de afrontar su emancipación con garantías.

¿Cómo os afecta y cómo os estáis adaptando a la situación del confinamiento/COVID19?

La situación de confinamiento nos ha llevado a adaptar todas las acciones de acompañamiento a jóvenes y voluntariado al espacio virtual o telefónico; así como el trabajo en equipo para desarrollar los proyectos. Des de la primera semana, hicimos propuestas de adaptación con orientaciones sobre cómo continuar la relación, pautas de autocuidado en estos tiempos para equilibrar las relaciones, propuestas de recursos para los encuentros virtuales, espacios de apoyo grupal y acompañamiento a cada pareja para adaptarlo a las necesidades y contexto concreto.

¿Con qué dificultades os estáis encontrando estos días? ¿Y con qué apoyos solidarios inesperados?

Las primera dificultad y barrera con la que nos encontramos fue la brecha digital (tanto en dispositivos como en conexión a Internet) por la que activamos algunas colaboraciones con Donalo.org y la Fundación Mobile World Capital, a quién agradecemos su generosidad. También, en algunos casos, nos encontramos con barreras emocionales respecto a la virtualización de las relaciones, así como barreras de contexto, por el hecho de no disponer de un espacio privado donde poder desarrollar los encuentros virtuales con confidencialidad.

Otras dificultades con las que nos hemos encontrado son en la necesidad de un mayor apoyo al estudio, asesoramiento laboral y jurídico, por lo que hemos contado con el apoyo del voluntariado del taller de estudio y de FEPA (Federación de Entidades con Proyectos y Pisos Asistidos). También ha habido necesidad de apoyo material por la disminución de los ingresos a raíz de los cambios laborales provocados por ERTO o despido. En este caso, hemos establecido una colaboración con la campaña TotsaTaula de la cooperativa Opcions.

Y, por último, a medida que pasan las semanas nos vamos encontrando con que las energías para la construcción de la relación de algunas personas, entre el voluntariado y jóvenes, van disminuyendo debido a la necesidad de cuidarse a ellas mismas o a las personas de su red más cercana. Para apoyar esta situación, hemos elaborado un vídeo motivador en el que les recordamos que estamos cerca si nos necesitan, unas pautas de autocuidado y reforzado el apoyo grupal.

¿Qué consecuencias está teniendo la situación actual para las personas mentoradas del colectivo con el que trabajas?

Más de la mitad de los y las jóvenes que trabajaban han visto afectada negativamente su situación laboral, ya sea por ERTE o paro, y especialmente los y las que trabajaban a tiempo parcial. Esta disminución de posibilidad de trabajo provoca en estos y estas jóvenes una disminución de los ingresos disponibles para su emancipación y, en consecuencia, más fragilidad en las opciones de vivienda disponibles, sumada a la ya precarización de la que partíamos antes de la crisis sanitaria debido a los altos precios de alquiler.

Respecto a la formación, hay una gran incertidumbre sobre qué pasará con las pruebas de acceso y la finalización de los cursos actuales, como por ejemplo la realización de prácticas. Esta incertidumbre provoca desmotivación en los y las jóvenes y angustia para saber cómo podrán continuar sus trayectorias formativas.

Respecto a la salud emocional y física, los y las jóvenes también se ven afectadas por la situación de confinamiento, como el resto de la población. A la vez, hay que tener en cuenta que los espacios donde viven pueden o no ser espacios de seguridad y calma, depende de cada caso; que las situaciones de estrés les pueden afectar más o menos a su salud mental; que el aburrimiento y la apatía pueden emerger en algunos casos con fuerza y truncar una rutina conseguida en los últimos meses; que las emociones de tristeza y angustia frente a la incertidumbre o frente a sus familiares en otros países, en algunos casos, puede ser importante. En este ámbito, cada caso es distinto y a la vez es muy relevante para su bienestar y sus energías a la hora de afrontar el reto que esta situación nos pone delante.

¿Qué consecuencias puede tener a medio-largo plazo?

A medio y largo plazo, probablemente, los y las jóvenes tendrán más dificultades para acceder a ofertas de trabajo y, como consecuencia, a los ingresos suficientes para emanciparse con garantías, que sumarán a la actual dificultad de acceso a la vivienda.

Por otra parte, la parada actual en la participación del sistema educativo puede provocar un alargamiento de las trayectorias formativas en algunos casos y aumentar las desigualdades educativas de partida. Sólo el 32% de la juventud tutelada está en el curso que le corresponde, respecto al 73,5% de la población general (Intress y UpSocial, 2015). Además, la imposibilidad de realizar las prácticas formativas significa perder una oportunidad para su currículum y para demostrar su potencial.

Por último, pero no menos importante, esta situación de confinamiento y crisis sanitaria puede provocar en algunos y algunas jóvenes aislamiento y dificultad para reconectar de nuevo con las personas con las que hasta ahora compartían su día a día y para afrontar los retos que se les presenten. Al igual que todos y todas, es posible que necesiten un tiempo para poder recuperar la energía para afrontar las demandas a las que tienen que dar respuesta, y ese tiempo no será posible por las exigencias hacia la emancipación que ya hemos comentado.

¿Puedes dar algún ejemplo anónimo sobre alguna situación concreta que os hayáis encontrado estos días?

Parejas que compartían un viaje alrededor del mundo a través de sus fotografías; jóvenes que en un inicio no quieren una videollamada pero que al escucharnos por teléfono nos piden que nos conectemos y que lo hagamos más a menudo; un joven que se peina y se viste bien para conocer en la asignación quién será su persona mentora; una joven comparte un vídeo de su ida al trabajo con la mentora con quién no están pudiendo hacer videollamadas por incompatibilidad horaria; el grupo de jóvenes y voluntariado de Atenea se ha auto-organizado para montar un vídeo de Sant Jordi para todas y así animarnos. A pesar de las dificultades, cada día nos encontramos con alguna situación que nos hace recordar que ser una red de apoyo es la clave en estos momentos. Cuando unas no podemos, otras están allí para recordarnos que sí.

¿Por qué es importante que los programas de mentoría sigan activos durante las semanas de confinamiento?

Porque abrir nuevas oportunidades es más importante que nunca para hacer frente a los retos que vienen.
Porque el desarrollo de la resiliencia de la juventud es siempre importante debido al contexto de partida, y ahora aún más, ya que los retos a afrontar serán aún más exigentes.
Porque la juventud tutelada y extutelada siempre tiene la exigencia de emanciparse, sea en el contexto que sea, y necesita, como todos y todas, vínculos y red de apoyo para hacerlo.

* Article publicat l’11 d’abril de 2020 a Social.cat

Per Marta López
Ja han passat tres setmanes des de l’anunci de l’estat d’alarma i l’inici del confinament, i sembla que comencen a arribar les bones notícies. Els experts diuen que hem assolit el pic del contagi i que el ritme de propagació és més lent. Sembla que podem començar a parlar de cert control de l’epidèmia al país. Paral·lelament, es comencen a debatre mesures de desconfinament, i fem hipòtesis sobre com serà la societat del futur resultant. Ens preguntem com seran les relacions humanes, com quedarà afectada la llibertat de moviments o si canviarem la nostra forma de treballar. I la veritat és que, de moment, tot són interrogants.

D’altra banda, tenim algunes certeses que, malauradament, no són positives. Sabem que som a les portes d’una crisi econòmica i social sense precedents que, a més de limitar l’accés als recursos materials de moltes persones, tindrà un impacte en la salut psicològica i emocional de tota la població. Avui, encara no sabem els efectes econòmics produïts per la Covid-19, però sí que sabem que, a aquest malestar, caldrà afegir-hi l’episodi de “trauma social” associat al confinament.

Per sort, en aquest context gris i ple d’incerteses, s’obre camí alguna nota positiva. Arreu, la població s’organitza per donar suport a les persones que ho tenen més complicat aquests dies. Les xarxes per garantir aliments a les persones aïllades o per acompanyar al metge a aquelles que no tenen mitjans propis, no paren de créixer. I és que, com en tota crisi, la resposta col·lectiva és sempre la millor de les respostes. La resposta fruit de la solidaritat i la identificació amb l’altre. La resposta d’acord amb l’empatia. Perquè només quan l’altre forma una mica part de tu, t’interpel·la i et fa reaccionar.

I és justament això el que busquem a través dels projectes de mentoria: crear vincles entre persones que, si no fos perquè es troben en el marc d’un projecte social, probablement no haurien coincidit mai. Persones d’entorns culturals, socials i econòmics molt diferents. Però persones que coincideixen i, a poc a poc, construeixen un lligam de confiança que fa possible que allò que cada una d’elles viu i sent deixi de ser indiferent per l’altre. Perquè l’altre, que inicialment pertany a un entorn desconegut, passa a tenir un nom i a viure una història que forma una mica part de tu.

La Coordinadora de Mentoria Social som una xarxa d’entitats que promovem la mentoria com a eina d’intervenció amb persones vulnerables. Cada any, des de les entitats promotores dels projectes de mentoria fem possible que milers de parelles comencin a caminar juntes. D’aquesta manera, la persona mentora es converteix en un recurs perquè la persona mentorada assoleixi les seves pròpies fites. Un recurs basat en un vincle personal que es tradueix, sobretot, en garantir suport i estabilitat emocional a la persona mentorada.

Que tenir vincles afectius és una condició per a l’estabilitat emocional i que aquesta estabilitat és un factor determinant en l’assoliment d’altres fites vitals és quelcom que ja sabíem d’abans. Ara, però, amb el confinament, s’ha posat de manifest amb més força. Les tres setmanes de #JoEmQuedoACasa ens han demostrat com és d’important tenir xarxa i saber que a l’altre costat de la pantalla o del telèfon hi ha algú que es preocupa per nosaltres.

Així, hem vist com la tasca que fan les persones mentores ha esdevingut un pilar en el sosteniment emocional de les persones mentorades. Les trobades setmanals presencials s’han convertit en videotrucades i les activitats culturals a l’aire lliure, en assistència a concerts o visites a museus de manera virtual. Les parelles, amb l’ajuda de les professionals que els donen suport, han trobat la manera de mantenir el vincle i de seguir-se cuidant a la distància.

Malauradament, això no és possible a totes les llars. No tothom té accés a xarxes de suport emocional fora de la família. No tothom té un entorn domèstic amb referents positius. Diverses organitzacions han denunciat aquests dies el drama de les dones que pateixen violència masclista. També el dels infants i joves l’estructura familiar dels quals s’està desmuntant en qüestió de segons. Situacions que ja existien abans, però que amb el confinament s’han tornat més extremes i han fet aflorar l’agreujament de les desigualtats.

D’aquí que, més enllà de reivindicar mesures com la Renda Garantida o la condonació dels lloguers, apostem per propostes que connectin les persones. Propostes que ens permetin trencar amb l’aïllament dels més vulnerables tot oferint-los la possibilitat de construir relacions en positiu. Propostes que, com la mentoria, ens connectin, ens interpel·lin i facin créixer el nostre capital social.

Només des d’aquesta convicció serà possible que superem aquest sotrac essent més forts i dignes socialment. En cas contrari, preparem-nos no només per la pobresa material, sinó també per la pobresa d’esperit.